miércoles, marzo 08, 2006

NI EN EL INFIERNO



HACEN HUMO Y HUELEN MAL. Pues eso mismo sucede aquí, en la España distraida y algo lela. Nuestro gobernantes andan envueltos en humo, son un bote de humo (smoke grenade, para entendernos) que oculta manejos, ideas y toma de posiciones. Si un día dejara de existir esa cortina veríamos lo que no deben ver los menores de cien años.

Gente de mala combustión, de mal carburador, de transmisión insesata y de freno caído. Gente que no va a ninguna parte, pero a toda velocidad. O sea, que si no los quieren ni en el infierno y hay que tirarlos por ahí, está claro que ya los han tirado y cayeron sobre nosotros.