A PIE DE IMAGEN

El buen Holmes debiera responder lo de "elemental" a su Querido Watson, pero resulta que no es tan elemental como parece el hecho de que un Estado trincado por el socialismo sea tan amigable con una banda de asesinos comunistas, ni es tan "elemental" que ningún gobierno, con el asunto de la democracia cagueta, haya querido acabar con Eta: porque medios no faltaron desde la UCD al PP: una buena embestida y los eterras, descendiendes de los fieros pero quietos gudaris, se hubieran entregado bien formados. Y con todo el equipo.

En cualquier caso, hay cosas entre el cielo y la tierra a las que no alcanza la razón española; por ejemplo, que sólo sea Dios quien castigue a los malos y premie a los buenos. Ya lo ven: las maneras socialistas hasta contradicen a Sherlock Holmes: un héroe ficticio contra un socialismo fantasma.

Los jefes socialistas no son elementales, pero sus seguidores, mucho.

El Rector 007