martes, febrero 07, 2006

QUE NO QUEDEN HUELLAS


De nuevo JOTA EFE "comete" un cuadro realista y minucioso. El aparente surrealismo de quemar lo que tanto ha costado trincar para Cataluña, se explica por el detalle de los archivos preparados en el suelo del dibujo: Fosos de Montjuich, Barcos Prisión, Checas de Barcelona... Y le queda tan propio el retrato de Carod que, vamos, sólo le falta callar.

He podido leer últimamente que quienes señalamos los diarios agravios que nos hacen algunos políticos catalanes de modo gratuito, fomentamos la incomprensión y que levantamos a España contra Cataluña. Sí: es cosa muy española: La culpa es de la víctima por dejarse victimar. La culpa de que algunos catalanistas hiervientes insulten todos los días al resto de los españoles (catalanes incluidos) es de quienes les dejamos hacer sin tomar medidas de verdad serias.

Otras voces, igualmente interesadas, insisten en una nueva "versión de los hechos". Voces liberales en su mayoría están de acuerdo con la consigna: la desconfianza y falta de credulidad en nuestros políticos y sus andanzas es un grave síntoma de fascismo. Si no los crees porque andas escarmentado, eres fascista. Y si te imaginas que algunos políticos catalanes han armado el alboroto de los "Papeles de Salamanca" para deshacerse de las evidencias de la triste historia de sus partidos (la de ERC es de película de terror y la del Psoe, de Checas compartidas con IU los verdes) y un reguero de cadáveres de Barcelona a la Junquera, si lo crees y así lo comentas, no será que padezcas el mal del fascismo chirriante sino que eres un "holocausta" en proyecto. Menos que un moro, que diría Maragall, el muy xenófobo, en la intimidad, que es donde no sabe escribir en catalán.
A. Robsy.